Un gran regalo para los amantes del té. “Los entendidos en esta bebida no beben serrín de las bolsas”, se dirá. Pero, ¿quién le impide meter en sobres tés buenos y caros y poner deliciosos dulces en la base del árbol de Navidad?
Qué se necesita
- Espuma de poliestireno;
- un tubo de cartón de 4,5 cm de altura;
- té envasado en bolsas de papel (la cantidad depende de la altura del árbol)
- cuadrados de caramelo;
- pistola de pegamento;
- cinta decorativa;
- palillo de dientes;
- pequeños adornos (lazos, estrellas, cuentas);
- tijeras;
- regla;
- lápiz;
- navaja multiusos;
- cintas de raso;
- cinta adhesiva de doble cara;
- brújula;
- red de zapatero;
- papel verde, blanco y marrón.
Cómo hacer
Haz una plantilla en forma de triángulo con papel blanco. La base mide 10 cm y la altura 18 cm. Pásalo al papel de espuma y recorta dos piezas. Ahora pégalos.
Pega la pieza en blanco con papel verde. Haz dos triángulos de una malla de tela de araña utilizando una plantilla. Fíjalos a la parte delantera del futuro árbol. Decora los bordes con cinta decorativa.
Coge un tubo de cartón y cúbrelo con papel de estraza. Este será el tronco. Pega trozos de espuma de poliestireno en el interior de la pieza. Tendrás un trozo, clava un palillo en el centro y luego pega la base. Ahora conecta el árbol y el tronco.
Para hacer la base del árbol de Navidad, corta un círculo de 7 cm de diámetro de espuma de plástico. Cúbrelo con papel verde y cinta adhesiva. Pega cinta adhesiva de doble cara en el lateral de esta pieza y coloca los caramelos sobre ella. Ata una cinta de raso alrededor de los caramelos. Utiliza pegamento y un palillo para fijar el árbol a la base.
Con trozos de cinta adhesiva de doble cara, grapa las bolsitas de té para formar dos cintas. Pega las cintas a los lados del árbol. Decora el recuerdo con lazos, cuentas y otros adornos pequeños y pega una estrella en la parte superior.
